El tiempo de juego no se trata solo de divertirse, también se trata de aprender. Cuando su pequeño está recitando una canción infantil, está trabajando en las habilidades de desarrollo del lenguaje.
¿A su hijo le encanta lanzar una pelota al aire y atraparla en el camino hacia abajo? Están desarrollando importantes habilidades motoras gruesas y de coordinación ojo-mano.
Durante la pandemia de COVID-19, muchos niños no han podido jugar con sus amigos y compañeros de clase, algo que es fundamental para su desarrollo. Si bien es importante que los niños interactúen con sus compañeros, también hay beneficios al jugar de forma independiente.
Hablamos con los expertos en educación y desarrollo infantil Syeda Sazia Zaman y Ferdousi Khanom del Instituto BRAC de Desarrollo Educativo de la Universidad BRAC sobre cómo los padres pueden fomentar el juego libre en sus hijos y por qué deberían hacerlo.
¿Por qué el juego es tan beneficioso para los niños?
“El juego está en el centro del desarrollo del niño”, explica Zaman. Los niños experimentan y aprenden sobre su mundo a través del juego: exploran su entorno físico, expresan sus emociones y construyen su vocabulario a través de momentos lúdicos.
“El juego es muy natural para los niños de todo el mundo”, agrega Khanom. “Es una herramienta realmente importante para el desarrollo cognitivo, físico, social y emocional de los niños y también para su imaginación y creatividad”.
¿Qué es el juego libre?
El juego libre es cuando los niños tienen plena libertad para jugar de la forma que quieran. “Pueden elegir todo: tienen la libertad de seleccionar sus materiales de juego, el área de interés e incluso la trama”, explica Zaman. Durante el tiempo de juego libre, los niños pueden expresarse de la manera que elijan según el día, la hora y la situación en la que se encuentren. “Este tipo de oportunidades son muy importantes para los niños”, dice Khanom.
Cada niño es único y tiene una forma diferente de expresarse. “Puede que tengas un niño que quiera dibujar, pero otro niño querrá jugar solo con un rompecabezas. Cada niño tiene una forma diferente de expresar su creatividad”, explica Khanom.
¿Cómo beneficia el juego libre a los niños?
“A veces es bueno que los niños jueguen solos o de forma independiente porque pueden ser más creativos cuando juegan solos”, dice Khanom. Cuando un niño juega solo, se involucra a sí mismo, usa su imaginación y “desde la primera infancia son independientes”, dice Zaman. Desarrollar la independencia a una edad temprana es beneficioso más adelante en la vida.
El juego libre también es importante para aprender habilidades para resolver problemas. “Pueden tratar de resolver un problema o encontrar una solución por su cuenta mientras juegan. Necesitan expresar su propia forma de pensar. Esas habilidades se desarrollan cuando un niño juega de forma independiente”, explica Khanom.
¿A partir de qué edad los padres deben introducir el juego libre a sus hijos?
El juego libre crea una oportunidad para que los niños exploren su mundo a su manera y ayuda a fomentar la creatividad y el uso de su imaginación, por lo que Khanom y Zaman recomiendan comenzar a una edad temprana. Los padres deben alentar a los niños pequeños y en edad preescolar a que participen en el juego libre de forma regular, pero con supervisión continua, incluso se puede presentar a bebés de 6 meses.
¿Cómo pueden los padres fomentar el juego libre en casa?
Aunque el juego libre tiene que ver con la independencia, los padres pueden apoyar y alentar a sus hijos a tener una experiencia de aprendizaje divertida y lúdica.
- Asegúrese de que su hijo tenga un espacio seguro para jugar. Cuando juegan libremente, los niños deben tener la oportunidad de explorar y hacer la mayoría de las cosas por su cuenta para desarrollar la confianza y la independencia. Sin embargo, es importante asegurarse de que su hijo tenga un entorno seguro para hacer esto. Despeje las áreas de juego de cualquier peligro potencial y controle durante el tiempo de juego para asegurarse de que su pequeño esté jugando de manera segura.
- Escuche a su hijo. Pregúntele a su hijo: «¿Qué quieres hacer hoy?» Según cómo respondan, ayude a crear un entorno en el que puedan explorar su interés. Por ejemplo, si quieren construir una casa, puedes apoyar brindándoles materiales y un espacio seguro para trabajar. Piense en los materiales que su hijo necesitaría y luego mire en su casa para ver qué hay disponible. ¡No tenga miedo de ser creativo! Por ejemplo, si su hijo quiere hacer un rompecabezas y no tiene uno en casa, use una imagen o un calendario y córtelos en pedazos para que los junte.
- Dé algunas pistas e indicaciones a lo largo del camino. Cuando su hijo enfrente un problema, puede guiarlo hacia una solución preguntándole “¿Qué quieres hacer? ¿Cómo podemos resolver este problema?” Como explica Zaman, “Los adultos no deben hacer todo por el niño. Solo necesitamos dar algunas pistas o apoyo para que los niños puedan pensar por sí mismos y hacer cosas por sí mismos”.
- Conviértalo en una actividad de vinculación. ¡El hecho de que su hijo juegue solo no significa que usted no pueda participar! Si su hijo quiere jugar con usted mientras usted está ocupado trabajando, intente hablar con él sobre algo que pueda hacer solo y luego, cuando haya terminado, pueden revisarlo juntos. Khanom a menudo adopta este enfoque con su propia hija: “Le pregunto ‘¿puedes escribir una historia, por favor?’ Sé que todavía no está escribiendo correctamente, pero lo que sea que escriba está bien. Luego me lo leerá en voz alta”. Al adoptar este enfoque, puede ayudar a involucrar a su hijo en diferentes actividades en las que puede jugar de forma independiente.
Artículo fuente: https://www.unicef.org/parenting/child-care/what-is-free-play